LA EVALUACION DE LA TRANSFERENCIA DE CONOCIMIENTO EN LA RELACION DE COOPERACION UNIVERSIDAD-EMPRESA:UNA VISION DESDE EL CONTEXTO DE LA SOCIEDAD DEL CO

Se ha considerado en los últimos años, que le conocimiento es un activo intangible que ha sido capaz de generar diversas ventajas competitivas para las organizaciones, y el crecimiento económico y bienestar de un país.

Esto ha llevado a los países y organizaciones a que mientras compiten entre sí, exista también una necesidad de cooperación. Con esta afirmación se puede decir que la cooperación es de gran importancia en el mundo, haciendo imposible comprender la realidad económica y social de hoy en día si no se estudia la cooperación.


Gracias a que todos los gobiernos, instituciones académicas y empresas cooperan entre sí, se ha logrado la transferencia una gran cantidad de conocimientos entre los países. Esta cooperación se fundamenta en la cultura que existe en las organizaciones, la cual percibe y valora las ventajas de las relaciones con otras organizaciones y favorece el establecimiento de relaciones interorganizacionales.

Actualmente muchas empresas y universidades han desarrollado sus actividades en una economía basada en el conocimiento. Estos valores, comportamiento, prácticas organizacionales, los intereses y objetivos las hace diferentes. Todos estos detalles afectan a la interacción y luego entonces a todas las alianzas basadas en transferencia de conocimientos.

La transferencia, en una economía de mercado, es vista como un proceso que se orienta a transmitir, incorporar, ceder, y/o vender conocimientos científicos y tecnológicos, por tanto, requiere de un eficiente y efectivo mecanismo de evaluación, que conduzca a mantener de manera sistemática y coherente la lógica de las relaciones interorganizacionales, con el objetivo de que las organizaciones que interectuan, alcancen la capacidad competitiva necesaria para poder intervenir en todos los procesos globalizados y salgan beneficiadas ambas.

Finalmente considero, que tanto las universidades como las empresas deben gestionar, de manera eficiente, el conocimiento, de tal forma que como instituciones, conviertan el conocimiento individual en conocimiento organizacional e interorganizacional, y se constituyan entonces, en parte del proceso que se orienta a la construcción de una verdadera sociedad generadora de conocimiento.